Ecología de nuestros Pisos Novaland

Nuestro bosque crece…
… con una progresiva producción de parquet
Construir el futuro con responsabilidad, significa tratar los recursos de la tierra cuidadosamente. También en el consumidor cae una responsabilidad considerable en este sentido.

La madera se ha utilizado desde siempre como materia prima natural para construir. El principio de rendimiento sostenido de la silvicultura nos asegura, que no se utiliza más bosque que la cantidad de arboles que crecen al mismo tiempo.

Conservación del ecosistema…
…a través del principio de rendimiento sostenido
Dióxido de carbono se extrae de la atmósfera de la tierra, mientras la madera procesada no se pudre, queme o se elimine térmicamente. Incluso en una eliminación térmica posterior se libera sólo la misma cantidad de dióxido de carbono que se extrajo anteriormente de la atmósfera. De esta manera se cierra el circulo. Por tanto el parquet es uno de los materiales de construcción menos contaminantes. Para la producción misma del parquet utilizamos sobre todo trozos de madera cortos y delgados. Por lo tanto es posible utilizar principalmente madera de troncos delgados obtenidos en el raleo. O bien aprovechamos extremos delgados y cortos los que se originan inevitablemente en el proceso de aserrío cómo producto restante.

Parquet NOVALAND…
…Su garantía para una actuación ecológica y económica
Más allá de la influencia en el medio ambiente mencionado anteriormente, se utiliza bastante menos energía el la producción de parquet que en materiales de construcción alternativos. Incluso esta energía no se produce de fuentes fósiles. En las fabricas de parquet NOVALAND utilizamos únicamente nuestros propios desechos de madera para la generación de vapor y energía. De esta manera se protegen materias primas fósiles y limitadamente utilizables, y la expulsión adicional de dióxido de carbono es evitado. Además : con este concepto de un circulo de energía cerrado perjudicamos lo menos posible al medio ambiente con nuestros desechos de producción. Nuestro balance ecológico es claramente positivo !
La madera cumple una importante función cómo almacén de CO2. El dióxido de carbono requerido para la asimilación se absorbe como carbono en la madera. Por lo tanto si plantamos madera para utilizarla más tarde, al mismo tiempo colaboramos con la disminución del efecto de invernadero.